También es recurrente para cubrir o disimular imperfecciones y cicatrices.
Es necesario que el paciente tenga, como mínimo, 20 años, puesto que es la edad a la que se considera alcanzada la madurez y desarrollo sexual.
Es un tratamiento definitivo que busca conseguir un resultado natural y acorde a cada paciente. Se trata de una intervención sencilla e indolora, en la que se suministra anestesia local. Extraemos pelo de los laterales o parte posterior de la cabeza para implantarlo en las zonas clareadas.
A pesar de que los resultados son visibles tras la intervención, hay que tener en cuenta que no son definitivos hasta pasados entre 10 y 12 meses. El pelo transplantado se caerá tras 3 semanas aproximadamente, y volverá a crecer al cabo de 3 o 4 meses. Después, se podrán observar los resultados definitivos.
Consúltanos la opción más adecuada para ti. En Instituto Marsil te aconsejaremos la mejor solución en tu caso.